El Bruxismo, un trastorno frecuente relacionado con el estrés y la ansiedad, ha experimentado un aumento durante la pandemia, manifestándose a través de síntomas como desgaste dental, dolor facial y sensibilidad dental. Existen dos tipos principales de Bruxismo: el céntrico, caracterizado por apretar los dientes, y el excéntrico, que se manifiesta con rechinar o frotar los dientes. Para prevenirlo, se recomienda utilizar un protector bucal durante la noche y evitar alimentos duros, además de acudir a un dentista para recibir el tratamiento adecuado.

 

Cuatro síntomas principales del Bruxismo

El Bruxismo se manifiesta a través de varios síntomas que pueden afectar tanto a los dientes como a los músculos faciales y estructuras relacionadas. A continuación, se describen los cuatro síntomas principales del Bruxismo:

Desgaste dental y problemas en la articulación temporomandibular (ATM)

Uno de los signos más comunes del Bruxismo es el desgaste dental. El hábito de apretar o rechinar los dientes puede ocasionar un desgaste excesivo, haciendo que los dientes pierdan su forma adecuada. Además, este trastorno también puede causar problemas en la articulación temporomandibular (ATM), lo que genera dolor y dificultad al abrir y cerrar la boca.

Dolor facial, sensibilidad dental y dolores de cabeza

Las personas que sufren de Bruxismo suelen experimentar dolor facial, que puede manifestarse en la zona de la mandíbula, el oído y el cuello. Además, también puede provocar sensibilidad dental, haciendo que los dientes sean más sensibles al frío y al calor. Asimismo, los dolores de cabeza frecuentes son otro síntoma asociado a este trastorno.

Tensión en los músculos faciales y dolor en mandíbula, oído y cuello

La tensión en los músculos faciales es otro síntoma característico del Bruxismo. Esto se debe al constante apretar o rechinar de los dientes, lo que genera una carga excesiva en los músculos de la mandíbula. Esta tensión puede generar dolores en la mandíbula, el oído y el cuello, dificultando la movilidad y causando molestias constantes.

Tipos de Bruxismo

El Bruxismo se puede clasificar en dos tipos principales: Bruxismo céntrico y Bruxismo excéntrico. A continuación, se detallan las características de cada uno:

Bruxismo céntrico (apretar los dientes)

En el Bruxismo céntrico, la persona tiende a apretar los dientes de manera constante y tensa, ejerciendo una gran presión en la mandíbula. Este tipo de Bruxismo suele ser más común durante el día y puede estar relacionado con el estrés y la ansiedad. Los síntomas típicos incluyen dolor en la mandíbula, desgaste dental y tensión en los músculos faciales.

Bruxismo excéntrico (rechinar o frotar los dientes)

Por otro lado, el Bruxismo excéntrico se caracteriza por el hábito de rechinar o frotar los dientes de forma repetitiva. Este tipo de Bruxismo generalmente ocurre durante la noche, mientras la persona duerme, y puede estar relacionado con una mala alineación de los dientes o una alteración en la articulación temporomandibular (ATM). Los síntomas más usuales son el desgaste dental, el dolor facial, la sensibilidad dental y los dolores de cabeza.

Es importante tener en cuenta que ambos tipos de Bruxismo pueden tener causas y factores asociados similares, como el estrés y la ansiedad. El diagnóstico y tratamiento adecuado del Bruxismo son fundamentales para prevenir el desgaste dental y aliviar los síntomas relacionados.

Causas y factores asociados al Bruxismo

El Bruxismo es un trastorno que puede tener diversas causas y factores asociados. A continuación, exploraremos algunas de las principales influencias relacionadas con esta condición.

Relación con el estrés y la ansiedad

El Bruxismo está estrechamente relacionado con el estrés y la ansiedad. Muchas personas tienden a apretar o rechinar sus dientes como respuesta a situaciones estresantes o como una forma de liberar la tensión acumulada. La presión emocional puede llevar a una mayor actividad involuntaria de los músculos de la mandíbula, lo que a su vez puede conducir al Bruxismo.

Influencia de la pandemia en el incremento del Bruxismo

La pandemia ha tenido un impacto significativo en el aumento de los casos de Bruxismo. Las condiciones de incertidumbre, el aumento del estrés y los cambios en las rutinas diarias han contribuido a que más personas experimenten este trastorno. El distanciamiento social, la preocupación por la salud y los cambios en el estilo de vida pueden generar un aumento en los niveles de estrés y ansiedad, lo que a su vez puede desencadenar el Bruxismo.

Alimentos y hábitos que pueden contribuir al Bruxismo

Algunos alimentos y hábitos también pueden influir en el desarrollo del Bruxismo. Masticar chicle en exceso o consumir alimentos duros y pegajosos puede ejercer una presión adicional en los músculos de la mandíbula, lo que aumenta la probabilidad de Bruxismo. Además, el consumo excesivo de cafeína o alcohol y el tabaquismo pueden afectar negativamente los patrones de sueño y la relajación muscular, favoreciendo la aparición de este trastorno.

Prevención y tratamiento del Bruxismo

El Bruxismo puede prevenirse y tratarse mediante diversas medidas. A continuación, se presentan las estrategias recomendadas:

Uso de protector bucal durante la noche

Para proteger los dientes y reducir el desgaste dental causado por el Bruxismo, es aconsejable utilizar un protector bucal durante la noche. Este dispositivo, hecho a medida por un odontólogo, crea una barrera física que evita el contacto y la presión excesiva entre los dientes, aliviando los síntomas y protegiendo la estructura dental.

Recomendaciones alimenticias y hábitos saludables

Además del uso del protector bucal, se recomienda llevar una dieta equilibrada y evitar alimentos duros o difíciles de masticar que puedan agravar el Bruxismo. Es importante mantenerse hidratado y consumir suficiente agua, ya que mantener una buena hidratación puede ayudar a relajar los músculos faciales y prevenir el apretamiento y el rechinamiento de los dientes.

Técnicas de relajación y estiramientos de los músculos faciales

La relajación de los músculos faciales puede ayudar a reducir la tensión y el estrés asociados con el Bruxismo. Practicar técnicas de relajación, como la respiración profunda, el yoga o la meditación, puede ayudar a disminuir la ansiedad y a aliviar la tensión muscular. Además, realizar estiramientos suaves de los músculos faciales, como abrir y cerrar la boca lentamente o masajear la mandíbula, puede contribuir a aliviar la sobrecarga y minimizar los síntomas.

Atención odontológica especializada y tratamiento con férula de descarga personalizada

En caso de padecer Bruxismo, es fundamental acudir a un dentista especializado en trastornos temporomandibulares y Bruxismo. El profesional evaluará el caso de forma individualizada y podrá recomendar el uso de una férula de descarga personalizada. Esta férula, hecha a medida, se coloca sobre los dientes y ayuda a reducir la presión y el desgaste dental, promoviendo una adecuada alineación mandibular y alivio de los síntomas asociados.